Etapas de un proyecto

Para que un proyecto empresarial sea susceptible de ser exitoso, debe pasar por 8 etapas:

1. Elegir. Durante esta etapa debes realizar una lluvia de ideas acerca de los negocios que quisieras emprender, por ejemplo: café internet, librería, venta de equipo de cómputo, pastelería, academia de pintura, etc. Para poder elegir uno de los giros que pensaste, puedes tomar en cuenta la competencia que ya existe, tus conocimientos sobre la actividad a realizar y las ventajas y desventajas de emprender cada idea de negocio.

2. Definir. Es importante que, una vez que hayas elegido el giro de tu negocio, definas cuál es la idea global del proyecto describiendo sus principales características, como: quiénes serán sus clientes, definir el mercado al que va dirigido, localización del establecimiento, servicios o productos a ofrecer destacando las características que los diferencían de los que ofrece la competencia.

3. Establecer. Establecer estrategias y líneas de acción, procesos de producción del producto o prestación del servicio, identificar claramente actividades y relaciones entre procesos.

4. Organización. Toda empresa debe definir su modelo organizativo, es decir, establecer su estructura, puestos, funciones, formas de comunicación interna, de toma de decisiones y el estilo de dirección a implementar.

5. Mercado. Hacer un estudio de mercado, ya que tus productos o servicios estarán orientados a los clientes y, por consiguiente, las acciones dentro de la empresa se encaminarán a ellos. Debes conocer cuáles son las necesidades, deseos, demandas y expectativas de los clientes para poder responder a todo lo que requieren. De ahí que también debas elaborar un plan de mercadeo, que consiste en definir tu cartera de productos, precios, costos, calidad, imagen o marca, forma de distribución y publicidad.

6. Recursos. Debes considerar cuánto dinero necesitas como inversión inicial así como considerar si cuentas con el dinero o necesitas alguna fuente externa de financiamiento para llevar a cabo tu idea. También requieres tener presentes los recursos humanos con que cuentas para poder arrancar el negocio, recuerda que los emprendedores trabajan en equipo, por lo que debes conocer quiénes te acompañarán en esta aventura y qué aporta cada uno de ellos. Otros recursos a considerar son los tecnológicos (equipo especializado o de uso general, como computadoras) que tu empresa necesita para operar y cómo los obtendrás.

7. Plan. Poner en marcha una empresa no es una tarea que pueda hacerse al vapor, por tal motivo, se deben planificar los pasos a seguir. Es importante que tomes en cuenta que cada actividad que se realice debe conseguir un objetivo previamente definido. Cuándo y cómo se realizará cada actividad responde a una determinada estrategia y a decisiones tomadas en base al análisis de mercado y al estudio económico. Primero deben resolverse los aspectos administrativos, legales, con organismos públicos y entidades financieras y, posteriormente, realizarse las actividades que van dirigidas al mercado, a los clientes potenciales. Este plan de lanzamiento se define previamente en el plan de mercadeo.

8. Valuación. Es necesario medir la rentabilidad de la inversión que se está realizando. Hay que hacer cálculos y estudios que nos llevarán a identificar el provecho o beneficio de seguir con el proyecto empresarial o, por el contrario, nos alertarán del riesgo de seguir con él.